r e l a t o s u c i o

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NOS CENTRAMOS

 

MF Enrique (+ de 40 años) consigue el número de móbil de Vero (13 justitos) en el metro, cuando ella misma se lo da en voz alta a una compañera. Enrique le envía mensajes sms obscenos hasta que acaban quedando y la viola. el mismo sitio. Ya hace tiempo que se ha acostumbrado a ella y ya no nota su presencia. Creo que empezó a hacer alguna de las cosas, pero pronto se olvidó/aburrió/distrayó-con-otra-cosa-más-interesante. El otro día cogió pasta y se compró un teclado Casio de juguete en un bazar de su calle. Quiere grabar un disco tocar. Quería buscar un sitio donde dieran clases de guitarra moderna. Quería escribir un guión. El DIN-A4 se llenó. La lista estaba colgada con una chincheta en una de las paredes de su dormitorio. No se había hecho ningún timeline ni nada, solo era una lista de cosas que tenía ganas de hacer. La lista está aun en viejas. Quería escribir una novela o algo. Quería visitar una casa de geishas. Quería buscar un emulador de MSX para PC y así poder jugar de nuevo a sus videojuegos de infancia. Quería hacer su propia web, un sitio extenso en el que compilaría datos sobre todas sus creaciones. Quería buscar un grupo de música para mundo dominado por magos nazis aliados con extraterrestres. Quería aprender a pintar. Tenía que devolver a la biblioteca de su antiguo colegio unos libros que llevaban casi 10 años en su casa. Los había encontrado casualmente dentro de una caja de cosas Geo, una caja que ahora estaba tirada de precio pero que en su momento había sido el máximo lujo. Empezó a escribir una falsa carta de suicidio con una infame idea para una peli, que fue llenando día a día. Quería hacer un videojuego, pero sin programar. 2 o más TEENS le atraían y más PROYECTOS, ese subnormal; como todos nosotros, creía que tenía tiempo y energía para todos sus proyectos. El problema con el que se encontraba cada vez era que no recordaba ni la mitad de ideas que se le habían ocurrido. A veces se olvidaba de ideas que acababa de tener. Un día decidió...

(no es autobiográfico)

the end (imaginar final triste)